Eric Barker propone en la revista Time una serie de consejos para que podamos ser más productivos, disfrutemos más de nuestro tiempo y no dediquemos absurdamente demasiado tiempo en algo que no lo requiere.
1. Tener automatismos: Decidir requiere un esfuerzo por parte nuestra mente, por lo que deberíamos hacerlo solo cuando sea verdaderamente necesario. Para poder solventar este problema necesitamos fomentar dos modelos de comportamiento: la voluntad y la disciplina. Ambos son necesarios para poder dejar atrás los hábitos negativos que nos impiden seguir una rutina sólida y saludable. Especialmente por la mañana, ya que estar organizados en los primeros momentos del día nos permitirá que el resto de horas las llevemos con más organización.
2. Controlar la cabeza. El ser productivo y lograr metas nos ayuda a ser más felices. Diversos estudios demuestran que ser optimista está muy relacionado con la consecución de objetivos y la productividad. Incluso, en ocasiones el exceso de confianza puede ser más beneficioso que tener los pies en la tierra.
3. No ser multitarea. Realizar varias actividades a la vez puede volverse muy complicado y disminuir nuestra productividad. Focalizar nuestros pensamientos y esfuerzos a los que realmente es importante en cada momento nos permitirá ser más resolutivos.
4. Chequear tus acciones. Un mecanismo muy útil son las checklists o listas de comprobación. Es valioso señalar nuestros objetivos del día a día en una hoja, ir comprobando si los cumplimos y, en caso afirmativo, marcarlos como ya logrados. El libro The Checklist Manifesto: How to Get Things Right (Picador) escrito por el cirujano Atul Gawande se centra en el estudio de cómo afectan las chekclists en el campo de la medicina y sus muchas virtudes. Realmente este instrumento sirve para tener unos objetivos claros, concisos y alcanzables en un razonable periodo de tiempo.
5. Tener sueño. Dormir poco o de forma inconstante no es una práctica que incida positivamente en nuestra salud. Descansar las suficientes horas nos ayudará a acometer el día venidero con mayor entereza y establecer unos horarios más sólidos en los que se evite las pérdidas de tiempo.
6. Seguir mejorando. Para poder mejorar, tanto en nuestra carrera profesional como en la personal, hemos de establecer diversas metas… Y revisarlas. Un buen método puede consistir en escribir las decisiones importantes y qué consecuencias creemos que tendrán en un determinado plazo de tiempo. Una vez transcurrido, será necesario observar dónde estamos realmente, si es mejor o peor, así como sus similitudes y diferencias con lo esperado en el momento inicial.