La empresa Inés Rosales y la Fundación Cobre las Cruces han recibido hoy el II premio a la responsabilidad social en la modalidad de pyme y de gran empresa respectivamente, que otorgan la Confederación Empresarial Sevillana y la Diputación de Sevilla a través de Prodetur.
Al premio se han presentado diecinueve empresas y once resultaron finalistas en esta segunda edición, en la que el jurado lo han conformado representantes del Ayuntamiento de Sevilla, Diputación, Delegación Territorial de la Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo, el Consejo Económico y Social de Sevilla, los consejos sociales de la Universidad de Sevilla, y de la Pablo de Olavide, Fundación Persán y de la propia Diputación y de la CES.
En su intervención, el presidente de la CES, Miguel Rus, ha reivindicado que la responsabilidad social empresarial no puede reducirse únicamente al patrocinio de acciones sociales o culturales sino que debe distinguirse también por la transparencia, la ética y el buen gobierno.
"Es indudable que una empresa responsable socialmente es mucho más valorada porque viene a demostrar que no sólo le preocupa su cuenta de resultados sino que procura que los beneficios repercutan en otras facetas de su actividad", ha afirmado.
Rus ha incidido en que una "imagen moralmente positiva ante la sociedad y el mercado permitirá a las empresas aumentar el grado de compromiso tanto de los trabajadores como de los clientes y proveedores".
El presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos, ha apostado por situar a la ciudadanía "en el centro" de las políticas y de las decisiones tanto en el ámbito público como privado, y ha apostillado: "A una ciudadanía que nos observa con recelo hay que responder con transparencia, sensibilidad, responsabilidad y compromiso con el futuro".
Ha advertido de que los ciudadanos "ya no toleran la falta de compromiso y honestidad en las instituciones públicas, como tampoco entienden una actitud empresarial que no sea sensible a la realidad y que no intente generar progreso y sostenibilidad en la comunidad en la que establece su negocio".
Inés Rosales, empresa netamente sevillana, con más de cien años de historia, ha sabido adaptarse a los tiempos y abrir nuevos caminos en el mercado exterior, y su contribución a la sociedad se refleja en su apuesta por la calidad en el empleo, la flexibilidad temporal y espacial, el apoyo a la familia y a la igualdad de oportunidades.
Cobre Las Cruces ha ejercido su responsabilidad social dando especial valor a la seguridad, conciliación, excelencia operacional, gestión de la información y de riesgos, seguridad, salud y medio ambiente, según la nota de la CES.