El Ministerio de Hacienda decretó en 2012 un nuevo régimen retributivo para los empleados del sector público cuando causaran baja por incapacidad temporal (IT). Hasta entonces, estos trabajadores cobraban el 100% de su salario desde el primer día de la incapacidad, algo que no suele ser habitual en el ámbito privado (la legislación establece según la duración de la baja un rango del 60% al 75%), excepto que el convenio colectivo correspondiente establezca que se complemente ese porcentaje hasta el 100%.
En opinión del Ejecutivo de Mariano Rajoy, se trataba de poner coto a las bajas fraudulentas, sobre todo aquellas de muy corta duración, que no debían justificarse siquiera con parte médico (hasta tres días). Hacienda pretendía acabar con el absentismo injustificado y sistemático, así como aumentar la productividad de las plantillas de la Administración.
Y es que desde hace ya más de dos años, los funcionarios y empleados públicos que causen baja por contingencias comunes ven reducido su salario los tres primeros días de incapacidad un 50%, si la baja se prolonga de cuatro a 20 días, pasan a percibir el 75% y solo si se trata de una dolencia más grave, que provoca una baja de más de 21 días, es cuando cobran el 100% de su sueldo.
Después de más de dos años desde que entró en vigor este recorte de prestaciones, el Ejecutivo sigue sin evaluar qué ahorros ha supuesto este cambio normativo, “ante la dificultad de recabar datos de tantos departamentos y organismos diferentes”, explican desde el departamento que dirige Cristóbal Montoro. En muchos de esos centros de trabajo no existían antes de 2012 controles de acceso de los trabajadores, por lo que se desconocía cuál era el grado de absentismo, pese a haber denunciado que era “muy elevado”.
A la espera del estudio anunciado por la Secretaría de Estado de Administraciones Públicas, la única fuente estadística que ofrece datos sobre pérdida de horas por incapacidad temporal es la encuesta trimestral de costes laborales que realiza el Instituto Nacional de Estadística (INE). Según sus últimas cifras disponibles, que datan del tercer trimestre de 2014, los trabajadores de la Administración Pública y defensa, adscritos a la Seguridad Social (quedan excluidos, por tanto, los pertenecientes a clases pasivas) perdieron en ese periodo un promedio de 5,16 horas al mes por IT, cuando en idéntico periodo de 2008, que es el año en el que arranca la serie, perdían un promedio de 6,29 horas. Se puede afirmar que las bajas laborales se han reducido un 17,9% en estos seis años, un porcentaje nada desdeñable.
Si se comparan estas cifras con lo que ocurre con los trabajadores de los sectores más representativos de la actividad privada, se observa cómo en las empresas el absentismo se ha reducido mucho más durante la crisis, en un promedio del 28,3%.
Para acceder a la noticia completa: http://cincodias.com/cincodias/2015/01/28/economia/1422464541_566978.html