El consumo de tabaco en el trabajo sigue siendo uno de los problemas que más afecta a las empresas. El coste medio anual que paga una empresa por cada uno de los trabajadores fumadores asciende a 2.000 euros, teniendo en cuenta la pérdida de productividad y el absentismo laboral.
Según un estudio del Centre for Economics and Business Research (CEBR), los trabajadores que son fumadores efectúan una media de 4 pausas al día para fumar, cada una de ellas con una duración aproximada de 10 minutos. En total, casi un promedio de 40 minutos al día fumando en horario laboral.
Esto afecta directamente a la productividad de la empresa, a lo que hay que añadir el impacto generado por razones de salud, ya que las bajas de un fumador suelen durar 4 días más que las de un trabajador que no fuma.
Tanta pérdida económica ha llevado a multitud de empresas a realizar políticas de control del tabaco en lugares de trabajo. Las restricciones del consumo en los lugares de trabajo son de gran relevancia ya que es donde la mayoría de las personas pasan más tiempo (el 50% del tiempo que están despiertos).
Además, la legislación de la salud y seguridad en el medio laboral exige a las empresas que protejan a su personal contra las sustancias nocivas en el trabajo. “No es fácil dejar de fumar. Lo primero es ser consciente de los problemas que este hábito puede ocasionar a tu salud y a tu entorno y finalmente, ser capaz de pedir ayuda a profesionales”, asegura la Dra. Leyre de la Peña.
Diversas empresas de asesoría han desarrollado programas que abarcan diferentes acciones, como la sensibilización de las empresas y trabajadores a partir de cursos de formación para la prevención del consumo de tabaco o el tratamiento y seguimiento de deshabituación tabáquica de forma individualizada. Los objetivos son tanto concienciar a las personas de los riesgos que conlleva el tabaquismo y de cómo repercute en la salud, como ayudarles en la cesación de este hábito.
En una encuesta realizada por Sanitas, el 86% de los empleados afirma que una plantilla con buena salud es más productiva. Sin embargo, en cuestiones relacionadas con el consumo de tabaco, sólo el 5% de los encuestados afirma que sus empresas le ofrecen ayuda para dejar de fumar y el 6% asegura que éstas organizan campañas de concienciación y educación relacionadas con la salud.
Para ampliar la información: http://www.prevencionintegral.com/actualidad/noticias/2015/01/31/coste-adicional-trabajador-fumador-para-su-empresa-es-2000-euros-anuales?utm_source=cerpie&utm_medium=email&utm_campaign=flash_04_03_2015