Alexandra y David Cortés definen su paso por la Academia como una experiencia muy enriquecedora en diferentes aspectos: “El hecho de recibir tanta ayuda desinteresada y sobre todo en el mundo empresarial, que siempre se asocia a competitividad, nos ha impactado de forma muy positiva. Desde los profesores, directores, padrinos... Solo hemos recibido apoyo y más apoyo. Cuando sales de allí sientes que tienes unas ganas enormes de hacer lo mismo por otras personas y emprendedores”.
Para ellos, la experiencia en la Academia de Operación Emprende les ha hecho crecer en todos los sentidos, además de crear unos vínculos estrechos de confianza y cariño entre todos los participantes.
El proyecto de estos dos jóvenes surge a raíz de una situación real, un accidente laboral en un grupo siderúrgico mundialmente conocido. La empresa y el directivo fueron demandados ante la justicia por negligencia, habiendo cumplido con las obligaciones legales en materia de prevención de riesgos laborales. “A pesar de toda la problemática que conlleva un accidente y después de las enormes consecuencias financieras y los largos procedimientos judiciales, el directivo decide tomar medidas y nos pusimos manos a la obra con él para crear Stop Murphy”, indican estos jóvenes emprendedores.
Las herramientas de Stop Murphy, absorben la información de estas tareas y ahorran tiempo de personal, ya que muestran de forma interactiva todos los puntos importantes a tener en cuenta a la hora de llevar a cabo cada uno de los procesos de interés que se desarrollen en la empresa, acompañando con la información pertinente relacionada con al PRL. “Usamos fotos así como mapas en 3D que permiten asociar un riesgo a una ubicación específica. Con el contenido multimedia interactivo (imágenes y videos 2D/3D) se consigue mejorar tanto la atención como la motivación de los trabajadores. En definitiva: Ahorro de tiempo, control, conservar experiencia de la empresa, herramienta de consulta, evitar mal entendidos, limitar la dependencia de personal, más productividad, diligencia y registro de la información al detalle.”, explica David Cortés.
Su aspiración es “acabar de desarrollar nuestras herramientas, darlas a conocer a las empresas y aplicarlas en diferentes sectores para facilitar las tareas que realizan las empresas y autónomos en la formación en prevención junto con los técnicos PRL. Queremos que Stop Murphy sea un referente en PRL y que gracias a sus métodos formativos y sus alianzas estratégicas se puedan reducir los riesgos humanos y la tasa de accidentes no solo en España sino en toda Europa.
Con respecto a las nuevas tecnologías afirman que son el motor de su empresa y sobre ellas se fundamentan los avances y productos que ofrecen al mercado. “Pensamos que son imprescindibles, estamos siempre atentos de los nuevos avances que aparecen en el mercado para ver cómo podemos sacar el máximo partido en beneficio de nuestros clientes/usuarios.”