Ejercen cargos con una alta responsabilidad que exigen muchas horas fuera de casa, que suelen estar bien retribuidos. Pero eso no quiere decir que no echen de menos a la familia y momentos para disfrutar de sus hijos. De hecho, a la hora de pedir un nuevo trabajo, el 91% de los directivos españoles asegura que la conciliación de la vida personal y laboral sería una de las condiciones más importantes que valoraría para un nuevo puesto.
Esta es una de las conclusiones que se refleja en el barómetros «Bienestar y motivación de los empleados en Europa 2015», realizado por Edenred e Ipsos, una encuesta anual en 14 países europeos y en el que han participado este año más de 13.600 trabajadores (800 de ellos de nuestro país). El estudio destaca que el 90% jefes de las empresas se sienten requerido fuera de su horario de trabajo, un porcentaje que se sitúa muy por encima de la media de trabajadores (65%). Quizá por ello, para el 48% de los directivos la principal preocupación laboral es el tiempo dedicado al trabajo, incluso más que el salario (27%) y el mantenimiento del empleo (24%). Unos datos que contrastan con lo que piensan el resto de los trabajadores españoles, pues para el 44% conservar el puesto de trabajo es su principal preocupación.
Ante este panorama, casi la mitad de los dirigentes de las empresas (44%) se planteaba abandonar su cargo (la media es un 40%) y muestran un nivel de estrés mayor que los demás. No obstante, también reconocen que tienen mayor calidad de vida en el trabajo y son los que más satisfechos están con su poder adquisitivo. Incluso muestran más confianza en el porvenir de su empresa y son más optimistas ante el futuro.