El consejero de Empleo, Empresa y Comercio de la Junta, José Sánchez Maldonado, ha subrayado en Sevilla que la prevención de riesgos laborales no puede ser considerada en las empresas como "un coste, sino como una inversión que hará que seamos más competitivos" y ha defendido que, si España quiere acercarse a los países de su entorno en materia de siniestralidad, se debe concienciar al tejido productivo de que "trabajar seguro debe ser nuestra forma de trabajar".
En la inauguración del III Encuentro de Cultura Preventiva, organizado por el Instituto Andaluz de Prevención de Riesgos Laborales (Iaprl), el consejero ha sostenido que la prevención de riesgos debe ir más allá del cumplimiento de las obligaciones legales por parte de empresas y trabajadores y debe convertirse en un "valor individual y colectivo que traspase las fronteras de los centros de trabajo".
El consejero ha avanzado que trabajan con los agentes sociales en la nueva Estrategia Andaluza de Seguridad y Salud en el Trabajo para el periodo 2016-2022, que, aunque continuará con programas desarrollados anteriormente que han sido eficaces en eliminar los factores de riesgo, se centrará en esta ocasión en promocionar la salud de los trabajadores. La nueva estrategia, según Sánchez Maldonado, deberá dirigirse a reforzar una prevención de riesgos laborales "al servicio de las personas" que tenga más presente los factores psicosociales, como el estrés laboral, y el entorno del centro de trabajo. No obstante, ha explicado que mantendrá los programas e instrumentos que han sido eficaces y útiles en la lucha contra la siniestralidad laboral "como lo demuestran los datos del periodo en el que se aplicó la anterior planificación entre los años 2010 y 2014, en los que se redujo un 23% el número total de accidentes laborales, y concretamente un 16% los mortales, y el índice de incidencia (indicador que mide el número de accidentes en proporción al número total de trabajadores) disminuyó un 20%".