La Consejería de Empleo, Empresa y Comercio pone en marcha en diciembre una campaña para evaluar cómo investigan las empresas andaluzas los accidentes laborales que padecen, con el objetivo que corregir posibles deficiencias en las medidas de prevención. Este estudio se extenderá a un total de 500 accidentes de trabajo registrados en el primer semestre de este año y se centrará especialmente en los accidentes sufridos por las pequeñas y medianas empresas de determinados sectores productivos seleccionados porque muestran una tendencia desfavorable en términos de siniestralidad laboral.
En concreto, se trata del sector agrícola, la industria de la alimentación, la fabricación y reparación de maquinaria, la industria de la madera, la construcción de edificios, las actividades postales y de correos, o los servicios sociales sin alojamiento, entre otros. Estos sectores acumulan más de 13.000 accidentes en los primeros seis meses del año y supondrán el 60% de los informes de investigación de accidentes que se van a evaluar a lo largo de esta campaña.
La Junta solicitará la información elaborada por las empresas para determinar los motivos por los que se produjeron los siniestros y evaluará si durante la investigación se tuvieron en cuenta todas las causas y, si a raíz del proceso de investigación, se propusieron las medidas correctoras adecuadas para asegurar que el accidente no se produzca en el futuro. Con la información obtenida por los técnicos de la Dirección General de Relaciones Laborales y Seguridad y Salud Laboral de la consejería, se corregirán posibles deficiencias en las medidas de prevención que, de no subsanarse, podrían dar origen a accidentes similares en el futuro con consecuencias más graves.
De manera paralela, se examinará también la información generada en los partes de declaración de accidentes, con el fin de comprobar si es consistente con el contenido de los informes de investigación. Posteriormente se pondrán en conocimiento de las empresas las carencias detectadas, con el fin de que procedan a corregirlas.
Esta campaña forma parte de un plan de refuerzo acordado este año entre la Junta de Andalucía y los agentes económicos y sociales, en el seno del Consejo Andaluz de Prevención de Riesgos Laborales (CAPRL), para combatir la siniestralidad laboral tras el alza registrada el pasado año, asociada a diversos factores como el incremento de la actividad económica, la recuperación de sectores con riesgos intrínsecos más elevados o la precarización de las condiciones de trabajo.
El plan tiene como objetivo dar una respuesta específica e inmediata a determinados aspectos, hasta la formulación definitiva de la nueva Estrategia Andaluza de Seguridad en el Trabajo 2017-2022.
Para mayor información: http://www.juntadeandalucia.es/organismos/empleoempresaycomercio/actualidad/noticias/detalle/141170.html