En el entorno laboral se produce la exposición de los trabajadores a diferentes tipos de riesgos. Entre ellos, las condiciones ambientales del trabajo conllevan la exposición a riesgos físicos asociados a las condiciones climáticas.
Se consideran fenómenos meteorológicos adversos los eventos atmosféricos capaces de producir, directa o indirectamente, daños a las personas o daños materiales de consideración. Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), en un sentido menos restringido, también puede considerarse como tal cualquier fenómeno susceptible de alterar la actividad humana de forma significativa en un ámbito espacial determinado.
En el sector de la construcción y, en particular en obra civil, la exposición a condiciones climatológicas adquiere una gran relevancia, puesto que muchas de las tareas se realizan a la intemperie, lo que supone que los trabajadores estén expuestos durante una parte de la jornada laboral a condiciones muy variables y, en algunos casos, extremas, como frío o calor intenso, viento, lluvia, radiaciones solares, etc.
Existen numerosos daños que pueden derivarse de este tipo de fenómenos, desde caídas por resbalones, hasta aplastamientos, contactos eléctricos, quemaduras, insolaciones, etc., especialmente cuando se alcanzan valores extremos. Se trata de riesgos que deben tenerse en cuenta tanto en la evaluación de riesgos como en la planificación de las actividades preventivas de cada empresa que, si bien en la mayor parte de los casos no pueden evitarse, sí es posible tomar medidas preventivas para minimizar sus efectos y evitar daños a la salud de los trabajadores.
Teniendo en cuenta la cantidad de trabajos que se ejecutan a la intemperie en una obra de construcción, la diversidad de condiciones climáticas que existe a lo largo de la geografía española y la variedad de fenómenos meteorológicos que pueden producirse en el transcurso del año, así como su gran poder destructor y la magnitud de los daños que pueden llegar a producir, es imprescindible que aquellas obras en las que existe exposición a tales condiciones ambientales, consideren los fenómenos atmosféricos como factores de riesgo que deben incluirse dentro de sus programas de prevención de riesgos laborales.
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http://www.lineaprevencion.com/uploads/proyecto/applications/ARCH5810aeac982df.pdf