La necesidad de certificación de las empresas para realizar tareas de desamiantado constituyó una de las principales demandas planteadas en este evento realizado en la sede de OSALAN ya que el mero registro en el RERA las autoriza para trabajar libremente sin ningún tipo de requisito adicional.
FORMACIÓN DE SEGURIDAD LABORAL y la FUNDACIÓN BORREDÁ, en colaboración con OSALAN (Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales), organizaron el pasado día 13 de junio en Bilbao un desayuno profesional que bajo el epígrafe “Presente y futuro del amianto desde la perspectiva de la PRL” reflejó los aspectos fundamentales de la dimensión real que supone la exposición laboral a este producto.
Este encuentro, inaugurado por Pilar Collantes, directora general de OSALAN, contó con la participación de José Antonio Vázquez, subdirector técnico de OSALAN; José Antonio Carnero, jefe de la Unidad Especializada de Seguridad y Salud Laboral de Bizkaia; Mª Carmen Arroyo, jefa de Proyecto del Departamento de Contaminantes y Toxicología del Centro Nacional de Verificación de Maquinaria de Vizcaya del INSHT; Gonzalo Zufía, gerente de IGR y presidente de Anedes; Sergio Cabana, secretario de Salud Laboral y Medio Ambiente de MCA-UGT Euskadi; Xavier Mundet, gerente de Atlas Gestión Medioambiental; Enrique Delgado, director comercial de DTS Servicios; y Ricardo Martínez, gerente de CESPA.
Uno de los temas principales del debate fue el fondo de compensación en torno al cual se analizaron las razones de su existencia y sus finalidades, la situación en España, los modelos francés, belga y holandés y quiénes deben sustentarlo y financiarlo.
Las intervenciones de los asistentes se centraron también en la legislación vigente actual en España y Europa, explicando comparativamente las diferencias que existen. Además, la feroz guerra de precios, la divergente interpretación de la normativa en función de la comunidad autónoma, la existencia de técnicos no cualificados en la identificación de la presencia de amianto y sus posibles peligros, fueron otros de los asuntos tratados.
La concienciación y sensibilización social y la responsabilidad de todos los implicados en la lucha contra los riesgos laborales derivados de la exposición al amianto, junto con una formación escrupulosa, exquisita y detallada, se erigieron como herramientas decisivas preventivas para los profesionales convocados a este evento.
Asbestosis, cáncer de pulmón y mesotelioma se destacaron como principales enfermedades producidas por el amianto, acordándose la necesidad de establecer un diagnóstico precoz y una compensación pertinente.