Se acaba el verano, esa estación de largos días de sol, vacaciones y diversión da paso al otoño con la caída de las hojas, bajada de las temperaturas, luz anaranjada y días lluviosos. Para los amantes de la nostalgia esta es la mejor época del año de la que podrán disfrutar 89 días y 20 horas antes de saludar al invierno. pero para la mayoría la disminución de la luz solar y la bajada de las temperaturas pueden ocasionar la conocida como astenia otoñal. Como explican los expertos, se trata de un síndrome transitorio que aparece con el cambio de estación como respuesta del organismo a los cambios medioambientales que altera los biorritmos y el ciclo de vigilia-sueño.
La principal responsable de esta alteración, según el psicólogo Roberto Castillejo, es la melatonina, una hormona encargada, entre otras cosas, de regular el sueño o la temperatura corporal. Su producción aumenta con la reducción de la luz solar y este incremento provoca una bajada de serotonina conocida como la hormona de la felicidad. El resultado es apatía, cansancio, somnolencia o tristeza. Si a estos factores hormonales le unimos los cambios climáticos, la diminución de las horas solares o la incorporación a la rutina con la consecuente reducción del contacto personal con amigos y familia la consecuencia es la astenia otoñal.
Para superar este bajo estado de ánimo los psicólogos recomiendan seguir 5 sencillas reglas.
La «depresión» otoñal se caracteriza porque los siguientes síntomas: