El invierno trae aparejado un aumento de los resfriados y los catarros. Muchas personas lo tienen asumido y lo llevan como pueden a base de analgésicos, aguante y una buena bufanda, pero otros acuden al médico y, en muchos casos, salen de la consulta con una receta para adquirir un antibiótico. Pero, ¿son estos realmente efectivos?
Según un estudio publicado ayer en The Lancet, los antibióticos –en concreto la amoxicilina, un derivado muy común de la penicilina– no tienen apenas incidencia en la cura de los resfriados comunes y, sin embargo, traen consigo un buen número de efectos secundarios. El asunto no es baladí. Los resfriados que conllevan pequeños dolores de garganta (con infecciones del tracto respiratorio), son las dolencias más habituales de las consultas de los médicos de atención primaria y, aunque muchas de estas infecciones son de origen vírico, el uso o no de antibióticos para tratar la dolencia es un tema muy debatido entre los médicos.
El doctor Paul Little, profesor en la Universidad de Southhampton (Reino Unido), ha asegurado en la presentación del estudio, que los pacientes a los que se receta amoxicilina para tratar un resfriado no se recuperan mucho más rápido ni tienen menos síntomas. En su opinión, usar amoxicilina para tratar infecciones respiratorias en pacientes que no tienen neumonía no ayuda y podría ser peligroso: “El abuso de antibióticos, muy habitual en las consultas primarias pese a que estos sean inefectivos, puede llevar a que el paciente sufra efectos secundarios como diarrea, erupciones cutáneas y vómitos, creando además resistencia a los mismos”.
Para ampliar la información: http://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2012/12/20/los-antibioticos-no-son-mas-efectivos-para-tratar-el-resfriado-que-el-azucar-111472/